Autorretrato VI

Descripción

«Autorretrato VI»

11×14 – Original Artwork

Acrylic and charcoal on cardstock. Hand-signed by the artist at the lower right. A one-of-a-kind piece.

An introspective and haunting nude figure that delves into the disintegration of the self, the fragility of the body, and identity in crisis. With a brutalist and gestural aesthetic, the work presents the distorted and fragmented form of a nude man, evoking the passage of time and the erosion of existence.

Through a rough and uncontrolled stroke, the artist constructs a vulnerable body, where the line does not define but rather suggests simultaneous presence and absence. The deformation of the face and rough texture evoke a sense of loss, deterioration, and exposure, while the dark elements surrounding the figure suggest emotional burdens, scars, and shadows of the past.

The open composition, with its expressive use of emptiness and unfinished textures, gives the image an ethereal and ghostly quality. The nude figure seems to waver between presence and disappearance, reinforcing the sense of instability and existential transition.

«Self-Portrait VI» belongs to Contemporary Expressionism and Art Brut, with influences from Gestural Drawing and Figurative Abstraction. Its raw strokes and intuitive execution recall psychic automatism, connecting to an artistic tradition where materiality and gestural marks reveal deep emotional and psychological states.
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11×14 – Original Artwork

Acrylic and charcoal on cardstock. Hand-signed by the artist at the lower right. A one-of-a-kind piece.

Figura desnuda introspectiva y desgarradora que se sumerge en la desintegración del yo, la fragilidad del cuerpo y la identidad en crisis. Con una estética brutalista y gestual, la obra presenta la figura de un hombre desnudo, figura distorsionada y fragmentada, evocando el paso del tiempo y la erosión de la existencia.

A través de un trazo áspero y descontrolado, el artista construye un cuerpo vulnerable, donde la línea no delimita, sino que sugiere presencias y ausencias simultáneamente. La deformación del rostro y la textura rugosa evocan una sensación de pérdida, desgaste y exposición, mientras que los elementos oscuros que rodean la figura sugieren cargas emocionales, cicatrices y sombras del pasado.

La composición abierta, con un uso expresivo del vacío y la textura inacabada, otorga a la imagen una cualidad etérea y fantasmagórica. La figura desnuda parece oscilar entre la presencia y la desaparición, reforzando la sensación de inestabilidad y tránsito existencial.

«Autorretrato VI» se inscribe en el Expresionismo Contemporáneo y el Art Brut, con influencias del Dibujo Gestual y la Abstracción Figurativa. Su trazo crudo y su ejecución intuitiva remiten al automatismo psíquico, conectando con una tradición artística en la que la materialidad y la huella del gesto revelan estados emocionales y psicológicos.